lunes, diciembre 11, 2006

Llantos por un asesino

Ayer murió el ex-dictador (y ya por suerte muy "ex") chileno Augusto Pinochet. A las puertas del hospital se estima que unos 3000 seguidores lloraban su muerte. En la tele salió que estos fieles seguidores estaban convencidos que desde España la prole de Blas Piñar y Cía. están con ellos en su dolor.

Se supone que esto está llamado a desaparecer. Yo no viví la muerte de aquel asesino español de apellido Franco, pero los que sí la vivieron me han dicho que las colas de gente para llorar su muerte eran increíbles. El caso del asesino chileno es algo distino: él ya llevaba 16 años fuera del poder oficialmente, y el país está gobernado por un gobierno socialista y presidido por Michelle Bachellet, una mujer que sufrió, al igual que su familia, el régimen de este asesino.

Aún así, sólo en las puertas del hospital, miles de personas le lloraban (algunos literalmente). Desde un punto de vista racional parece increíble, pero tal vez en este caso se pueda apreciar la división de la sociedad que hizo Marx: los opresores y los oprimidos. Y si no, que alguien con dos dedos de frente pueda justificar esta pena de miles de chilenos partidarios de Pinochet, cuando éste realizó las siguientes "hazañas" durante su dictadura:

"...A partir de órdenes dictadas a través de cadena nacional de radio y televisión proscribió los partidos políticos, disolvió el Congreso, restringió los derechos civiles y políticos y ordenó la detención de los máximos líderes de la Unidad Popular [coalición de partidos de centro-izquierda e izquierda de Chile], declarándola ilegal. Pinochet fue nombrado presidente de la República por los demás integrantes de la Junta de Gobierno el 17 de diciembre de 1974."

"...Se introdujo como política de Estado la detención, tortura, asesinato, desaparición o exilio de quienes se hubiesen involucrado con el gobierno anterior, configurando el concepto de «terrorismo de Estado»."
"...Se estimuló la xenofobia para evitar ayuda exterior a los movimientos subversivos. La tortura fue también una herramienta común usada para combatir a los no partidarios del nuevo gobierno, como queda consigando en el Informe Valech sobre Prisión Política y Tortura (2005). Cientos de miles de chilenos abandonaron el país para escapar del régimen. En 1994 todavía permanecían en el exterior sobre 700.000 personas según la Oficina Nacional del Retorno."


"...Para formular su política de estabilización económica, Pinochet confió en los llamados Chicago boys, economistas neoliberales con postgrados en la Universidad de Chicago, fuertemente influenciados por las políticas monetarias de Milton Friedman. Se aplicó el shock que consistía en reducir el gasto publico en un 20%, despedir al 30% de los empleados públicos, aumentar el IVA (impuesto a la transferencia comercial de bienes muebles y activos M1 y M2), privatizar la mayor parte de las empresas estatales (la mayoría a precios ínfimos) [Esto me recuerda a un presidente español con bigote saliente en 2004] y liquidar los sistemas de ahorro y de préstamos de vivienda."

(Fuente: Wikipedia)

Supongo que la sociedad por sí sola se va situando poco a poco dentro de los límites racionales (hace 2000 años no se veía mal exponer gente a que la devorasen fieras mientras se vitoreaba a un emperador, ahora creo que está bastante peor visto). Las opiniones de algún chileno que le ve aún como "el héroe nacional que salvó a Chile del comunismo" (pero no lo salvó de las atrocidades que vivió el pueblo) es posible que caigan en el olvido dentro de unos años. Y que nadie se confunda, por mucho que se nombrara presidente de la República en el 74, su forma de gobierno nada tuvo que ver con una soberanía republicana, sino que aquéllo sólo era una cruel dictadura militar.

Para terminar, quisiera poner unas líneas de Mario Benedetti que vienen al caso y hacer incapié en que es una pena que no se condenase a este torturador y asesino a tiempo (asesino, por ejemplo, de Salvador Allende).

A la muerte de un canalla
Por: Mario Benedetti (Fecha publicación:10/12/2006)

Los canallas viven mucho, pero algún día se mueren
Obituario con hurras

Vamos a festejarlo
vengan todoslos inocentes
los damnificados los que gritan de noche
los que sueñan de día
los que sufren el cuerpo
los que alojan fantasmas
los que pisan descalzos
los que blasfeman y arden
los pobres congelados
los que quieren a alguien
los que nunca se olvidan
vamos a festejarlo
vengan todos
el crápula se ha muerto
se acabó el alma negra
el ladrónel cochino
se acabó para siempre
hurraque vengan todos
vamos a festejarlo
a no decir
la muerte
siempre lo borra todo
todo lo purifica
cualquier día
la muerte
no borra nada
quedan
siempre las cicatrices
hurra
murió el cretino
vamos a festejarlo
a no llorar de vicio
que lloren sus iguales
y se traguen sus lágrimas
se acabó el monstruo prócer
se acabó para siempre
vamos a festejarlo
a no ponernos tibios
a no creer que éste
es un muerto cualquiera
vamos a festejarlo
a no volvernos flojos
a no olvidar que éste
es un muerto de mierda.

Saludetes.

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